anta Clara del Mar ha sido testigo de una historia de superación y determinación que ha conmovido a la comunidad. Martín Di Salvo, Un joven ciego de nacimiento decidió mudarse solo a esta encantadora localidad, lejos de sus padres, en busca de independencia y nuevas oportunidades.

Su aventura comenzó con un programa de fútbol en la radio local, donde demostró su pasión y conocimiento sobre el deporte, ganándose la admiración de los oyentes. Con el tiempo, emprendió la venta de postales y remeras, utilizando su creatividad y espíritu emprendedor para salir adelante.
No obstante, fue su talento musical lo que realmente capturó los corazones de los habitantes de Santa Clara del Mar. Cantando en las calles, acompañado de su parlante y su micrófono, para recibir colaboraciones, su voz se convirtió en un símbolo de esperanza y alegría. Este talento le valió el cariñoso título de “La Voz de Santa Clara”.
En reconocimiento a su impacto positivo en la comunidad, la municipalidad le permitió instalar su letra “M” de cemento en un espacio público, la cual él mismo se encargó de embellecer. Este lugar se ha convertido en un punto de encuentro, donde cada día los vecinos y visitantes pasan momentos agradables, compartiendo historias y disfrutando de la música.
La historia de este joven es un ejemplo de resiliencia y cómo la fuerza de voluntad puede transformar vidas y comunidades enteras. Su legado perdura no solo en sus canciones, sino también en los corazones de todos los que han tenido el privilegio de conocerlo.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *