Estela de Carlotto es una figura clave en la lucha por los derechos humanos en Argentina. Es la presidenta de Abuelas de Plaza de Mayo, una organización dedicada a la búsqueda y restitución de los nietos apropiados durante la última dictadura cívico-militar (1976-1983).
Su lucha comenzó en 1977, cuando su hija, Laura Carlotto, militante de Montoneros, fue secuestrada estando embarazada. Laura dio a luz en cautiverio, pero su hijo fue apropiado por la dictadura. Estela se convirtió en un símbolo de resistencia y perseverancia en la búsqueda de los nietos apropiados. En 2014, tras casi 40 años de lucha, logró encontrar a su nieto, Ignacio Montoya Carlotto.
Además de su trabajo en Abuelas, Estela de Carlotto ha sido una voz fundamental en la defensa de la memoria, la verdad y la justicia en Argentina. Su compromiso la ha llevado a recibir múltiples reconocimientos nacionales e internacionales.